Una de las falacias que te venden, es que llegará el momento en que tu vida exitosa será perfecta. Sin problemas.
La vida no la viviremos de esa manera. No hay colores rosas.
Nuestra naturaleza, como seres humanos es imperfecta cometemos errores e involuntariamente, fallamos.
Ni uno solo de nosotros poseemos la perfección.
Solo somos seres perfectibles.
Por lo cual, hay momentos en nuestra vida que estaremos atravesando grandes tormentas y quizá no tomemos las mejores decisiones.
En este mundo afrontaremos todos los días retos, situaciones problemáticas que forjarán nuestro carácter.
La tormenta no durará para siempre.
Podemos afrontar todo con nuestros ojos puestos en Dios. Confiados en Él.
Dios siempre está trabajando con nuestro corazón.
Nunca se nos dijo que estar en este mundo sería fácil.
Pero tenemos una esperanza.